#AGUAPOTABLE
Vecinos del litoral de Barbate promueven una red de agua potable
Comercio, hostelería y vecinos impulsan un proyecto que se ejecutaría desde Zahora a Caños de Meca
EL INDEPENDIENTE DE CÁDIZ
A la espera de que a través de la aprobación definitiva del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) se formalice el futuro desarrollo del término municipal de Barbate y se acometan los correspondientes procesos urbanísticos, los vecinos, comerciantes y hosteleros de Zahora y Caños de Meca han decidido impulsar un proyecto que persigue dotar de una red de agua potable a estas zonas del litoral jandeño.
La iniciativa, que, según los promotores de la misma, podría beneficiar de partida a cerca de un millar de edificaciones (aún no existe un censo real), se desarrollaría en base a lo recogido en el PGOU y, en gran parte, al amparo del Decreto que la Junta aprobó el pasado año para favorecer la llegada de los servicios básicos a edificaciones no legalizadas sobre las que no pesen expedientes de demolición, se enclaven en zonas protegidas, etcétera. Un proyecto cuyos costes, en torno a 1,6 millones de euros, recaerían íntegramente sobre los vecinos.
“Se trata de adelantarnos a los futuros procesos de desarrollo urbanístico, de forma que, siempre atendiendo a la legalidad, nos podamos beneficiar de algo tan básico y necesario como el agua potable”, destaca Juan Carlos Reyes, presidente de la asociación de vecinos Playa de La Laja.
El proyecto, que se plantea una vez que desde la administración regional se ha desarrollado la red en alta, prevé la construcción de una red media y de los correspondientes ramales secundarios, contemplándose la ejecución de seis tramos diferenciados y de complejidad dispar.
“Ahora, una vez que tenemos la posibilidad real de abordar el proyecto”, añade, “lo primero es trasladárselo a los afectados y sondear el interés de participación real que suscita, ya que para poner en marcha algo así se hace muy necesaria la implicación mayoritaria de sus potenciales beneficiarios”.
De este proyecto, resalta, no se podrán beneficiar edificaciones susceptibles de demolición ni parcelas en las que no existan edificaciones. Una vez se cuantifique la demanda vecinal en términos objetivos, “los siguientes pasos serán volcar estos datos sobre plano; desarrollar los proyectos de ejecución y cuantificar el coste de las actuaciones. Un conjunto de tareas que contará con la supervisión del Ayuntamiento de Barbate y de la empresa concesionaria del servicio, Aqualia, a la que, una vez que se vaya culminando la ejecución de los distintos tramos, se le hará entrega de las obras para la posterior tramitación de enganches y para que, al igual que ocurre con la red urbana, se haga cargo del mantenimiento de los mismos”.
En lo que a los costes se refiere, si bien los representantes vecinales tienen claro que deberán ser los vecinos, comerciantes y hosteleros los que deberán cargar con la totalidad de los mismos, los impulsores del proyecto contemplan la firma de un protocolo con el Ayuntamiento en el que, además de los aspectos antes destacados, se contemplen algunas bonificaciones.
Sobre dichas bonificaciones, el representante vecinal adelanta que “aún están por concretar, pero esperamos que el Ayuntamiento las estime oportunas en compensación por el esfuerzo económico que vamos a tener que realizar quienes vivimos o desarrollan una actividad económica en la zona para hacer posible la construcción de una infraestructura de estas dimensiones”.
Por otra parte, Juan Carlos Reyes apunta que “en el protocolo que deberemos rubricar con el Ayuntamiento queremos que también se recoja que parte del dinero que en un futuro se obtenga por la conexión a la red de nuevas edificaciones se dedique a realizar mejoras de diversa índole en la zona, de este modo también se vería recompensado el esfuerzo que pretendemos realizar ahora”.
Así las cosas, la iniciativa, que también ha sido promovida por el propio Ayuntamiento de Barbate, ha iniciado ya su andadura para que, como corresponde, sea conocida por la totalidad de los interesados.
Con dicha intención, las distintas asociaciones y colectivos económicos tienen previsto poner en marcha una página web en la que se vayan trasladando todas las noticias referidas al proceso y en la que, a su vez, los vecinos puedan plantear sus dudas y opiniones sobre el mismo.
Por último, los colectivos participantes tienen la idea de formar una comisión en la que, entre otros aspectos, se deberá debatir y proponer las fórmulas de pago y las cargas que tendrán que soportar los vecinos, comerciantes y hosteleros en base a las características de las distintas edificaciones.